Transfiguración significado bíblico

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Definición. El significado bíblico de transfiguración, se refiere al cambio de forma o transformación que muestra el verdadero ser. En la Biblia, encontraremos que ese fue uno de los milagros más importantes de Jesús de Nazaret.

Mediante este proceso, Cristo mostró a sus discípulos su verdadero aspecto celestial. Lo consideramos como la cúspide de la demostración de su divinidad. Puesto que, ya no quedaron dudas sobre su poder y de que todo lo que anunciaba era cierto.

En honor a este acontecimiento, vemos que se construyeron diversos templos en diferentes partes del mundo. Así, nos encontramos con la Iglesia de la Transfiguración, ubicada en el monte Tabor de Israel. Ya que este fue el sitio donde las escrituras nos indican que se llevó a cabo el milagroso hecho.

Transfiguración de Jesús de Nazaret

Nos relatan los Evangelios, que un día Cristo se mostró en todo su esplendor, frente a algunos de sus discípulos. En razón, que se trasladó al Monte Tabor en compañía de Juan, Santiago y Pedro. Allí, vemos en las escrituras, que Jesús comenzó a irradiar un brillo radiante.

En el momento de este impactante milagro, la historia nos narra que aparecieron a su lado los profetas Moisés y Elías. De inmediato, Jesús mantuvo una conversación con ellos acerca de su muerte, puesto que ya se aproximaba el tiempo de morir por todos nosotros.

Los discípulos se asustaron mucho al presenciar la transfiguración. Entonces, nos señala la Biblia, que Pedro ofreció construir tres enramadas en su honor. Sin duda, creemos que se refería a las que se hacían en las fiestas de los Tabernáculos.

No obstante, narran las escrituras que en ese momento una nube de niebla invadió el lugar y del cielo sonó una voz. Era Dios, indicando que ahí estaba su hijo y que a él debían oír. Vemos que esta representación entre nubes, es similar a la que ocurrió el día del bautizo de Jesús en el río Jordán.

La transfiguración mensaje para la humanidad

Luego de que Dios hablara en medio de la niebla, nos cuenta la historia que desaparecieron los profetas y quedó Jesús solo con sus discípulos. Este les pidió no revelar nada de lo que presenciaron, hasta después de su resurrección.

De esta transfiguración aprendemos, que el Señor indica que tenemos que ser fieles a Cristo. Ya que, Moisés y Elías representan la ley y los profetas, pero es a Jesús a quien debemos oír desde ese momento. Pues, podemos seguir las tradiciones antiguas, con los cambios que Cristo considere necesarias.

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