Marca significado bíblico

marca

Definición. El significado bíblico de marca, es sello o señal que se coloca sobre alguien o algo. Su principal finalidad consiste en distinguir o denotar la pertenencia con la que se corresponde. En la mayoría de los casos, es posible que no se borre con facilidad.

La marca especial en Caín

En Génesis 4:14-15 encontramos lo siguiente 'He aquí me echas hoy de la tierra, y de tu presencia me esconderé, y seré errante y extranjero. Y sucederá que cualquiera que me hallaré, me matará. Y le respondió Jehová: el que le diera muerte, siete veces se le castigará. Entonces Dios puso marca en Caín, para que no lo asesinase el que le encontrara'.

El episodio de la marca o señal, no desvela la vida de Abel y Caín, este último sentía envidia de su hermano porque era el predilecto del señor. Por eso, se levantó en su contra y le quitó la vida. Cuando Jehová se enteró de lo ocurrido, le maldijo.

El padre santo le dijo a Caín que sería errante en la tierra y extranjero. Sin embargo, le puso una marca para que no le matase cualquier hombre que le hallase. Es así, que se fue a habitar en la Nod, que se situaba al oriente de Edén, y allí conoció a su mujer, quien tuvo a Enoc.

La marca de Pablo

El evangelio nos dice que el apóstol Pablo llevó cicatriz o estigma que se causaron por los latigazos que le propiciaron los soldados romanos. Él afirmó que cargaba en su cuerpo la marca del señor Jesús, cosa que le enorgullecía.

En el episodio de Gálatas vemos la forma en la que Pablo se gloría en la cruz de cristo a través de su marca. Emitía una queja sobre la circuncisión, porque decía que ni aún ellos guardaban la ley. Comentó que en la presencia de cristo todo ello no valía nada, sino la nueva creación.

La marca o señal de propiedad

En los versículos de Ezequiel Jehová decía que pasaran por en medio de Jerusalén y colocaran una marca en la frente a los hombres que gemían y clamaban. Esto a causa de las abominaciones que se hacen en su nombre.

El capítulo de la marca presenta una descripción de los castigos futuros que vendrían por parte del señor. Ezequiel vio que Jerusalén se tornó en corrupción y por eso Dios llamó a un hombre que salvaría a los que aún se mantenían fieles en sus promesas.

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