Hechicería significado bíblico

hechiceria

Definición. El significado bíblico de hechicería, es práctica oculta que influye sobre las personas a través de hechos sobrenaturales. Se trata de una especie de encantamiento que se condena en los pasajes del antiguo testamento.

Se podría relacionar a la hechicería con la falsa idolatría, aquellas que llegaron a cometer los israelitas en contra del señor. Las personas que practican esto, demuestran que no creen en el Dios verdadero, pues, adoran a deidades enemigas.

En los versículos del primer libro de Samuel, encontramos un ejemplo de hechicería. En la época antigua, Saúl logró comunicarse con un difunto, lo que pudo tratarse de una especie de engaño, aunque no de una bruja como tal.

Fuese hechicería o no, Jehová condenó las acciones de Saúl, diciendo que lo que hizo estaba en contra de su ley.

La hechicería y las prohibiciones de Dios

El señor siempre fue claro con sus preceptos y estatutos. Una de las cosas que condenó fue la hechicería, sin dejar de lado, la adivinación o los encantamientos que llevaban a cabo los magos de la época.

Las personas no debían hacer hechicería o consultar a los muertos, puesto que, todo ello se consideraba un pecado grave. Era una abominación, así se muestra no solo en el antiguo testamento, sino también en el nuevo.

Cabe destacar, que Pablo cita a la hechicería dentro de las obras de la carne. En tanto que, sus contemporáneos la veían como un engaño sin fundamento alguno. Alegaban que se trataba de acciones que no estaban sujetas a los verdaderos poderes de Jehová.

Por su parte, se asocia la hechicería con la participación de los demonios desencadenados por Satanás en el mundo. Ya de por sí es bastante malo el hecho de predecir el futuro e intervenir por medio de los poderes de culto.

¿Qué más dice la Biblia de la hechicería?

En las santas escrituras se condenan ciertas cosas, por ejemplo, el hablar con espíritus, la adivinación o la hechicería sobre otros seres humanos. Esta es una práctica de poca confiabilidad que solo los débiles de espíritu son capaces de efectuar.

En el libro de las Crónicas se condena a Manasés por las prácticas malignas que realizaba y que incluían a la hechicería. Este hombre consultaba a encantadores y adivinos, se excedía haciendo lo malo ante la mirada de Dios, por lo que, siempre encendía su ira.

La Biblia dice que esta práctica es pecaminosa y que marca la vida de los que en realidad no creen en Dios.

Subir