Sansana significado bíblico

Definición. El significado bíblico de Sansana, es una ciudad que se ubicaba al sur de Judá y que se menciona en algunos de los pasajes de Josué. Se le relaciona con Siclag porque su localización era parecida y allí residió también el pueblo de Israel y la gran mayoría de las tribus que obtuvieron su heredad.

Hay que señalar que el término Sansana es hebreo y en español quiere decir una rama de palma u hoja de palmera. Se le menciona junto con Madmana y algunos estudiosos afirman que es idéntica a Hazar-susa, de las que pertenecieron a la familia de Simeón.

Asimismo, sabemos que Sansana estaba a unos 16 km al noreste de Beerseba, uno de los sitios más antiguos que aparecen en la Biblia. Y que a la par, se caracterizaba por sus montes bajos y sus abundantes llanuras donde era posible convivir.

Sansana: villa adjudicada a la tribu de Judá

Es importante resaltar el hecho de que Sansana formó parte relevante en la colocación de la tierra para los hijos de Judá. Se trató de una heredad destinada a los miembros de esta tribu que se distribuyeron hacia el extremo sur cerca de la frontera de Edom.

Al lado de Sansana sobresalieron otras villas pobladas por los hijos del Creador, como Baala, Lim, Siclag o Madmana. Se contaron en total veintinueve ciudades, cada una con sus aldeas. Mientras que, figuraron otras en las llanuras, las montañas y próximas al mar grande repleto por sus costas.

Por su parte, Sansana se repartió en suerte a la tribu de los de Judá según sus linajes y registros familiares. Así pues, se establecieron ciertos límites para que no existiesen confusiones con los demás personajes que también recibieron lo que les pertenecía siguiendo los estatutos del Señor.

Sansana y los descendientes de Simeón

En el primer libro de las Crónicas se hace referencia a Sansana y otras ciudades como Bet-birai o Bet-marcabot que existieron hasta el reinado de David. También, se hace referencia a los hijos de Simeón que pudieron residir allí. Se nombra a Nemuel, Jamín, Saúl y otros que establecieron sus propias descendencias y poblaron la tierra.

Además, dentro de los de la tribu de Simeón sobresalieron hombres prósperos y valientes que ejercieron su servicio ante Jehová. Formaron parte de las ciudades, aldeas y villas en las que sentaron su habitación y las casas de sus padres se multiplicaron en gran manera al recibir las bendiciones del Altísimo.