Rejilla significado bíblico
Definición. El significado bíblico de rejilla, es una especie de red hecha de bronce, madera u otros materiales que se colocaban debajo de la parte superior del gran altar de alabanza. Su empleo era perfecto en el holocausto porque gracias a sus varas era posible quemar los sacrificios haciendo que las cenizas cayeran sin mayor problema.
La rejilla se movía por un aro que también era de bronce y que tenía cuatro esquinas, así se referencia en los pasajes del libro del Éxodo. Era un objeto que penetraba en el atrio y que se elaboraba con la madera más fina de Sittim.
La rejilla y el simbolismo del altar de bronce
El altar que disponía de rejilla representaba la imagen de la verdadera humanidad procedente del hijo de Dios. A la vez, era una figura que simbolizaba la justicia y la santidad que tenían que ver con los conceptos de pecado y pecador.
El bronce de la rejilla era sólido, resistente, capaz de soportar las altas temperaturas que venían de las llamas que consumían todo. Ello, tiene que ver con el sufrimiento que padeció Jesucristo en manos de sus hostigadores. Él se enfrentó al ardor de la cólera del Padre a causa de los pecados de su pueblo.
El sacrificio de Cristo fue voluntario, entregó su vida en una misión con un carácter sumiso y la perseverancia de seguir los preceptos de su padre. Esto nos deja una enseñanza de que quienes acuden al Espíritu Santo pueden salvarse santificándose como si se tratara de una obra de la redención divina.
Construcción del altar y la rejilla
Sabemos que la rejilla formó parte de un altar hueco que se conformaba por cuatro tablas apoyadas y enrejadas. Se contaron extremos que poseían anillos de bronce en los que se podían introducir las varas hechas de madera acacia.
Cada vez que los antiguos necesitaban transportar el altar, tenían que hacerlo por medio de la rejilla con sumo cuidado. Cuando se le empleaba, se colocaba leña y una víctima en la parte superior de la misma. En seguida, se producía el ardor del fuego y el aire salía por debajo.
Asimismo, el altar disponía de diversos símbolos como cuernos u ojos profanos que representaban el sacrificio de cristo el día que se dejó clavar en la cruz. Las columnas del cerco se adornaban con capiteles de plata. Hay que destacar, que en el sufrimiento de Jesús tuvo que experimentar todo el ardor que venía de la cólera de Jehová.