Reca significado bíblico

Definición. El significado bíblico de Reca, es villa que se menciona en la genealogía de Judá en el primer libro de las Crónicas. A pesar de que no se conoce una ubicación exacta, se sabe que formó parte relevante de tal territorio.

En tanto que, el término Reca tiene una connotación hebrea que viene dada de la raíz Rêkâb que en español se traduce como lugar blando o lado. Respecto a la descripción de esta villa, entendemos que se trataba de un núcleo de la población de tipo rural.

Así pues, en Reca se realizaban diversas explotaciones agrícolas de la mano de los que se dedicaban al cultivo. Siendo así, que los trabajadores del campo tuvieran protagonismo y la mayoría de ellos, servían al Señor.

Respecto a la extensión de Reca, es posible que fuese pequeña, pero de más tamaño que una aldea común. Sin embargo, no era tan grande como una ciudad, aunque, sí se establecían sistemas de impuestos que favorecían el crecimiento económico de la población.

Los hombres que pertenecieron a Reca

En los escritos bíblicos se hace referencia a los varones de Reca, allí figuraban Bet-rafa, Paseah y Tehina. Todos estos provenían de Estón y es así como se nos revela que fueron personajes bastante relevantes para la época.

Por su parte, los hombres de Reca expandieron su linaje y a la par, dejaron múltiples enseñanzas que tenían que ver con la adoración a Jehová. Estableciendo de este modo, la importancia de ser servicial con la familia y de seguir las ordenanzas que les legó su padre, Estón.

Reca y las bendiciones de Judá

Sabemos que Reca tiene un lugar preponderante dentro de la genealogía de Judá. Esto se debe a que formó parte de los territorios que se adjudicaron a la tribu que llevaba el mismo nombre. Por ello, sus vecindarios recibieron las múltiples bendiciones procedentes de Dios.

De manera similar, los de Reca eran hombres y mujeres que tenían una excelente actitud de servicio. Fueron partícipes del reconocimiento del Altísimo y le legaron sus beneficios a las venideras generaciones.

Así lo vemos en el siguiente versículo de Génesis 49:8-10, 'Judá, te alabarán tus hermanos; tu mano en la cerviz de tus enemigos. Los hijos de tu padre se inclinarán a ti. Cachorro de león; de la presa subiste. Se encorvó, se echó y dijo: ¿Quién lo despertará? No se quitará el cetro de Judá, ni el legislador de entre sus pies, hasta que venga Siloh; Y a él se congregarán los pueblos'.