Espejo significado bíblico

espejo

Definición. El significado bíblico de espejo es un objeto manual de tocador. Este artículo se usaba en distintas civilizaciones de la antigüedad, siendo la primera la egipcia. Por eso, el pueblo de Israel la conoció muy bien, cuando eran esclavos de esta nación. Incluso, en el tabernáculo, tenían una estructura de metal que formaba parte de la fuente.

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¿Qué materiales se empleaban en la fabricación de los espejos?

Al principio de la historia de la humanidad, no habían descubierto la manera de hacer vidrios. Sin embargo, esas culturas se las arreglaron para crear unos objetos que pudieran reflejar la apariencia de una persona. En ocasiones, los espejos se construían de piedra pulida. No obstante, la más habitual era que se hicieran con bronce, cobre, plata u oro.

Cuando estos objetos se elaboraban de algún tipo de metal, debían pulirse con esmero para que después de la fundición pudiera mostrar la imagen de lo que tenía al frente. Aunque el retrato que proyectaba era borroso y la faltaba mucha claridad, de igual forma servía para tener una idea de la apariencia de las personas.

Una manera de lograr que el metal fundido reflejase la imagen de forma adecuada, era empleando la piedra pómez en polvo. Esta debía aplicarse todos los días con una esponja que por lo general colgaba del espejo, por medio de una cuerda. Sin embargo, estos no tenían la misma calidad que los que existen en la actualidad. Una evidencia de esto, fue las palabras de Pablo a los Corintios, a quien le dijo que estos objetos emitían una imagen borrosa.

¿De qué manera se utilizó el término espejo en la Biblia?

Varios escritores de las santas escrituras se refirieron a ese objeto de modo simbólico o figurativo. Por ejemplo, en el libro de Job se compara a los cielos con un espejo. En el contexto de este pasaje se explica parte de lo que hoy conocemos como el ciclo de agua.

Por otro lado, el discípulo Santiago usó este término cuando trataba a sus hermanos en la fe a no ser oidores de la Palabra, sino hacedores. Él indica que si una persona se miraba al espejo y no hace nada por mejorar su apariencia, entonces no estaría aprovechando esa gran herramienta.

Asimismo, es el hombre que escucha las verdades bíblicas y no la pone en práctica. En cambio, pablo dijo que los cristianos reflejan la gloria de Dios con sus obras como u espejo.

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