Confesión de cristo significado bíblico
Definición. El significado bíblico de confesión de Cristo, es manifestación que se expresa a Jesús como un acto de fe al enunciar culpas, sentimientos o pensamientos. Se relaciona con la conformidad, al aceptar las normas de Dios y al entender cuál es su misión o su propósito para nosotros.
La confesión de Cristo suele llevarse a cabo en los templos o en las iglesias, en donde también se realizan oraciones que les permitirán a los hombres ser salvos. Esto significa que deben hablar o expresar la forma en la que se sienten, no dejando de lado ninguna clase de detalle que se considere relevante.
Vídeo sobre el significado bíblico de Confesión de cristo
https://www.youtube.com/watch?v=BUrCcjU-4i8
La confesión de Cristo en la Biblia
A lo largo de los capítulos del libro de romanos se habla de la confesión de Cristo al emitir palabras que salen de la boca de los creyentes y de sus corazones. Al predicar que nos afirmamos en su poder y que murió y resucitó en la cruz, estamos alcanzando el camino de la salvación.
Todo aquel que realiza la confesión de Cristo manifiesta la obra de Jesús y sus acciones se conducen en la fe. Por supuesto que, aquí también hay que darle el lugar a Dios que es el padre misericordioso y que envió su hijo al mundo para liberarnos de las penas y de la condena eterna.
¿Qué significa la confesión de Cristo?
La confesión de Cristo nos hace reconocerle como el único rey que nos librará de todos los delitos y pecados que pudieron cometerse en vida. Sin su presencia, no tenemos voluntad propia, no somos capaces de llegar al cielo si no creemos en las promesas de su padre, aquellas que se nos legaron desde la época de Moisés o Abraham.
Si no realizamos la confesión de Cristo, no obtendremos la reconciliación eterna, teniendo en cuenta que somos pecadores por nacimiento y Dios puede destituirnos si así lo desea. Significa una unión en la cual acatamos las leyes divinas y pretendemos agradar al creador.
Propósito de la confesión de Cristo
La confesión de Cristo tiene como principal misión el hecho de justificarnos a través del camino de la redención que sólo puede llevarse a cabo de la mano de Jesús. Nos concede la justicia perfecta y quita de nosotros las culpas que podamos sentir delante de Dios y del mesías. Nos libra de ser enemigos de Jehová para convertirnos en sus hijos en la tierra que no dejan de lado sus leyes y ordenanzas.