Zaaván significado bíblico
Definición. El significado bíblico de Zaaván, es hijo de Ezer, parte del linaje de Jacob y Esaú. La traducción del vocablo quiere decir inquieto, que tiembla o se estremece de terror. Se cree que, si el nombre es semita, se tratase de un origen horeo.
Zaaván y los descendientes de Esaú
En el libro del Génesis se menciona a Zaaván junto con los hijos de Ezer, quienes eran Bilhán y Acán. Todos estos integraron parte fundamental de la genealogía de Esaú, el cual es el mismo que Edom.
En el inicio, la Biblia señala que Esaú tomó a dos mujeres, quienes eran las hijas de Canaán, varios de sus proles nacieron y se criaron en estas tierras. No obstante, este personaje tuvo que agarrar a sus bienes, sus familiares y a las cosas de su casa para separarse de su hermano llamado Jacob.
Lo que sucedía, era que las pertenencias de ambos eran muchas y por lo tanto, no podían permanecer o morar juntos en el mismo territorio. Es así como esta descendencia, de la que formó parte Zaaván, también se ubica en el monte de Seir, porque Esaú se trasladó allí con sus ganados y parientes para vivir.
Zaaván y los linajes de Esaú
Las Santas escrituras nos presentan el nombre de Zaaván y otros descendientes que formaron parte de la línea genealógica de Esaú. Todos estos habitaron en el monte de Seir, y se les clasifica de manera ordenada en la cronología.
En el mismo episodio en el que aparece Zaaván, se hace referencia a los jefes de entre los hijos de Esaú. Estos fueron hombres valientes y vigorosos que tomaron las riendas de cada una de las casas paternas que se encargaron de liderar.
Zaaván y el plan de Dios
Es importante hacer una distinción entre Jacob y Esaú, dos hermanos que se eligieron para diferentes propósitos. Cuando vemos a los Reyes y a los jefes entre los descendientes de Zaaván, apreciamos las palabras que Dios dijo y que aparecen en Malaquías.
El señor comentó que él amó a Jacob y aborreció a Esaú. Esta es la razón por la que uno de ellos tuvo un plan esencial en la redención del señor. Mientras que el otro, siempre sintió rechazo, pero de igual modo, contó con las bendiciones provenientes del Padre Celestial.
No cabe duda de que Dios no se apartó de la familia de Zaaván que fue una de las que no eligió. Es posible que varios de sus integrantes no fueran espirituales en sus designios.