Setenta discípulos significado bíblico
Definición. El significado bíblico de setenta discípulos, es nombre de algunos de los hombres que acompañaron a nuestro señor Jesucristo durante su camino en la tierra. Todos ellos contaban con una misión especial que se comenta en los pasajes del libro de Lucas.
La Biblia señala al personaje de Andrónico como uno de los setenta discípulos que estuvieron al servicio de cristo. Este se caracterizó por ser ministro en el reino de Antíoco IV Epífanes. De él se dijo que fue un apóstol venerador en lo que a las tradiciones de la época se refiere.
El envío de los setenta discípulos
Nuestro Señor Jesucristo dejó ciertas instrucciones a los setenta discípulos antes de su partida. Él los mandó de dos en dos delante de él y de toda la ciudad hacia los lugares a los que debían ir. También les dijo que les enviaba como corderos en medio de lobos, se trató de una metáfora en específico.
La misión de Cristo con los setenta discípulos consistió en prepararlos para que accedieran a los lugares que él no podría asistir y difundieran el Evangelio. El hijo de Dios estaba seguro de que el tiempo antes de su crucifixión era bastante corto, y aún le quedaban cosas importantes por hacer.
Jesús entonces se dirigió a este gran número de setenta discípulos con la finalidad de que se convirtieran en sus mensajeros alrededor de todo el mundo.
Setenta discípulos y los interesados en seguir a Cristo
Al igual que los setenta discípulos, existieron otras personas que tenían gran interés en convertirse en los seguidores de Jesús. Esto iba más allá de los doce apóstoles que seleccionó y que le acompañaron durante su recorrido.
En la actualidad se especula respecto al número de setenta que Cristo eligió como sus discípulos. Quizá se trató de una cifra sabia o se relacionaba con los ancianos que subieron con Moisés en el monte del Sinaí para apreciar la gloria de Dios, tal como lo relatan los versículos del libro de Éxodo.
Dado que los setenta discípulos le sirvieron a Jesús de manera exclusiva, serían dignos de apreciar la gloria del reino venidero. Algunos creen que el número seleccionado se debió a una asociación específica con los miembros del Sanedrín.
Lo que sí es cierto, es que el señor les enseñó a los setenta discípulos la necesidad de concordia entre los ministros de la justicia. Les instauró a permanecer fuertes y a apoyar a todos los que pudiesen en su trabajo de difusión del Evangelio.