Sarcófago significado bíblico

Definición. El significado bíblico de sarcófago, es especie de sepulcro en el que se le da sepultura a un cadáver. Se le suele comparar con un ataúd o una cama antigua en la cual, los restos de la gente reposaban, solo que esta vez, de manera permanente.

¿Cómo era el sarcófago?

Por lo general, el sarcófago o sepulcro se realizaba con piedras calizas para garantizar una estructura sólida que preservara los cuerpos muertos de las personas. La traducción literal de esta palabra quiere decir aquel que se come o devora la carne.

En la antigüedad, se creía que el sarcófago era capaz de desaparecer los cuerpos que ahí se introducían. Pues, el paso del tiempo hacía de las suyas y muchos consideraban que se trataba de poderes especiales que poseía ese objeto.

Tengamos en cuenta que el sarcófago fue uno de esos elementos que formaban parte de las costumbres o tradiciones de los pueblos. Era esencial para despedirse de los cuerpos de sus amados difuntos, aunque, algunos los enterraban bajo tierra u otros les quemaban o momificaban.

Funcionamiento del sarcófago

Podría decirse que el sarcófago se empleaba con la finalidad de albergar dentro de él un ataúd, que era la caja en la que se depositaban los restos del fallecido. Se trataba de una especie de receptáculo o recipiente que variaba en sus tamaños, diseños y modelos.

El funcionamiento del sarcófago llegó a ser bastante resaltante en la era del antiguo testamento y en la tradición de los egipcios. Se dice que a los miembros de la realeza se les depositaba allí cuando partían hacia el otro lado, es decir, el más allá.

Por supuesto que, el cuerpo de las personas que entraban en el sarcófago tenía que pasar por un proceso de modificación o embalsamamiento. Estos rituales eran bastante comunes para la época y se relacionaban con la veneración que tenían las personas hacia la vida eterna.

En el antiguo Egipto era tradicional el hecho de ubicar el cadáver en el sarcófago y de dejarlo en una pirámide o en una construcción de carácter monumental. Esta es una razón por la que, en la actualidad, se siguen descubriendo cuerpos que datan de miles de años atrás.

El sarcófago de Tuntankamón

Conviene citar que existieron sarcófagos que contaban con piedras preciosas a su alrededor, así como hermosos elementos decorativos. 1 de ellos fue el que le perteneció a Tuntankamón, quien murió en el año 1327 antes de la venida de nuestro señor Jesucristo.