Cetro significado bíblico
Definición. El significado bíblico de cetro es una vara de oro o de otro elemento precioso que portaban los monarcas, emperadores y faraones. Pues, con ellos se mostraba la dignidad y autoridad hacia el pueblo.
Vídeo sobre el significado bíblico de Cetro
En el shevet hebreo, cetro significa bastón, por lo que también alude a cualquier tipo de vara que se lleve en las manos. En este sentido, en algunas ocasiones se encuentra la palabra usada en referencia a un cayado o una lanza.
Menciones de cetros
El término cetro en la Biblia se empleó en innumerables ocasiones, pues la palabra se empleaba con el fin de hablar de cualquier tipo de palo. Así, Samuel utiliza dos veces el vocablo para nombrar una lanza con la cual un hombre mató a un egipcio que tenía un cetro de oro.
No obstante, el cetro original determina un símbolo de un rey, líder o juez. En génesis, se puede encontrar cuando se describe al cetro de Judá. Este pasaje lo que quiere decir es que el territorio tenía soberanía por una conquista.
De igual manera, en números se expresa que el cetro de Israel se levantará y herirá a las sienes de Moab. Una clara alusión a que el pueblo israelí iría a la batalla en contra de los moabitas y saldrían victoriosos.
En otra oportunidad, Isaías manifiesta que el creador quebró el báculo de los impíos y el cetro de los señores.
También en Salmos aparece el vocablo con el fin de simbolizar el poder de Dios. Pues escribe que el cetro es la justicia de su reino.
Jerjes, un coronado jefe oriental, tiene un relato en el que extiende su cetro a Ester como una muestra de su favor. Ezequiel se refiere a varas creadas por medio de ramas de vides.
La última mención de un cetro es cuando Jesús se capturó y ridiculizó por los guardias romanos. Los cuales, le colocaron en sus manos una vara de caña haciendo alusión a su título de rey de los judíos.
Cetros antiguos
Por medio de unas excavaciones de tumbas se encontraron algunos cetros bañados en elementos costosos. En el sarcófago de Tutankamón hallaron uno que se adornó con piedras y gemas azules, que pueden ser zafiros, está ahora se exhibe en el famoso museo de El Cairo.
Otros se enterraron junto a esculturas en Mesopotamia y en Egipto. En la momia de un gobernante persa estaba uno intacto.