Peres significado bíblico

peres

Definición. El significado bíblico de Peres, es nombre de varios personajes que pertenecieron a los registros del antiguo testamento. Sin embargo, también se designa así a una palabra aramea que empleó Daniel en la interpretación de una obra en la pared que citaba Mene Tekel Parsín. Esto se señala en las escrituras de las Américas en relación con una mina o un siclo.

En otras traducciones de la Biblia se hace mención a Peres como el singular de Parsín aludiendo a que el significado del vocablo es medio siclo. Existen otras interpretaciones de diversos profetas de la antigüedad.

Así pues, el término Peres en español quiere decir dividido, lo que se refiere a un reino de los tiempos bíblicos que se le otorgó a los medos y a los persas. Por lo tanto, es precisa la explicación de ciertos estudiosos que combinaron vocablos, demostrando exactitud en su interpretación.

Peres y la descendencia de Manasés

En el primer libro de las Crónicas se menciona a Peres como uno de los personajes que pertenecieron a la misma línea genealógica de Manasés. Se nombra junto con Maaca quien fue su madre y con su hermano Seres.

En el principio, los parientes fueron Asriel, Maquir y Maaca dio a luz a un hijo al que llamó Peres. De allí vinieron al mundo los de Seres, quienes eran Ulam y Requem. Más adelante, los de Galaad siguieron poblando la tierra y todos ellos habitaron en las granjas que Jehová les legó en cada una de sus heredades.

Peres y  la parte de la escritura en la pared interpretada por Daniel

La palabra Peres figura de manera sobresaliente en el relato del rey Belsasar y la interpretación que le concedió Daniel respecto a la escritura de una pared. Sucedió que en aquellos días hubo un banquete porque Nabucodonosor trajo del templo de Dios vino para que bebiesen con los grandes, las mujeres y concubinas.

Esa misma noche aparecieron los dedos de la mano de un hombre escribiendo sobre una pared un mensaje misterioso. Entonces el rey se asustó y mandó a llamar a magos, adivinos y caldeos con el fin de que interpretaran dicho texto. Sin embargo, fue Daniel quien leyó la escritura donde Peres significaba tu reino se rompió y se le dio a los medos y a los persas.  

Dado que Daniel interpretó el mensaje de la pared de forma correcta, el rey le recompensó vistiéndolo de púrpura y adornando su cuello con un collar de oro. Lo decretó también como el tercer señor del reino.

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