Pena de muerte significado bíblico
Definición. El significado bíblico de pena de muerte se refiere a la máxima sanción que obtenían los criminales por sus delitos. Este castigo, ponía fin a la vida de aquellos que habían cometido faltas graves que afecten la tranquilidad de la sociedad. Pues, vemos en la Biblia, que algunas sanciones aplicadas, era bastante drásticas.
Terminar con la existencia de una persona, es un hecho atroz desde cualquier punto de vista. Por ello, en la actualidad, las leyes buscan proteger al ser humano, sin importar el delito que haya cometido.
Esto ocurre, porque partimos de la premisa de que Dios es amor y misericordia. Y será él, quien tiene el poder de juzgar el fin de esa persona que ha incurrido en una falta. Allí es donde debemos tener presente la línea que divide a la justicia del hombre de la divina.
Pena de muerte en el Antiguo Testamento
Nos vamos a conseguir diferentes pasajes en la Biblia, que nos muestran la manera de imponer esta sanción. La conducta de los seres humanos se encontraba bastante medida por las leyes de la época. De hecho, notaremos que las autoridades mantenían una postura muy radical hacia ciertos comportamientos.
Nos revelan las escrituras, que el homicidio se castigaba con el fin de la vida, atendiendo la ley del Talión o el Código de Hanmurabi. No obstante, también se sancionaba con la pena de muerte, otros delitos graves como el secuestro y la violación.
De igual manera, era el precio a pagar por algunas conductas consideradas abominables: la bestialidad, el adulterio, la homosexualidad, la prostitución o ser un falso profeta. Por ese motivo, la condena impuesta a tales comportamientos era poner fin a sus vidas.
Por ello, vemos que para la época, las autoridades no daban oportunidad de arrepentirse. Esa redención que llego al mundo con Jesucristo, no la conseguimos en el antiguo testamento. Pues, todo criminal debe tener la posibilidad de cambiar y mejorar mientras paga por sus delitos, sin necesidad de morir.
Castigos más atroces de la historia
Una vez que determinaban que una persona era culpable, dependiendo del crimen y de la jurisdicción, se le aplicaba la pena de muerte. En ocasiones los ejecutaban y luego los colgaban en la plaza simulando un ahorcamiento.
Otras veces utilizaban el método de empalar, atravesando un madero a través de sus cuerpos para exhibirlos. Además, vemos castigos como la lapidación, donde apedreaban al condenado hasta morir. Y por supuesto, la crucifixión, que fue la sanción aplicada a Cristo y muchos otros hombres como pena de muerte.