Nibsán significado bíblico

nibsan calendario

Definición. El significado bíblico de Nibsán, es nombre que se otorgó a uno de los meses del calendario que en la época antigua se conocía como Abib. Según los relatos de Nehemías, tal evento se estableció después de la cautividad el primero del año religioso.

Es posible afirmar que Nibsán tuvo valor sagrado y encajó con otros hechos bíblicos como el de la sal en la destrucción de Sodoma y Gomorra. Puesto que, Jehová emitió leyes y tratados que bajo ninguna circunstancia debían desobedecerse.

Nibsán y el rey Asuero

Asimismo, podemos apreciar esta palabra en el siguiente pasaje de Ester 3:7, 'En el mes primero, que es el mes de Nibsán, en el año duodécimo del rey Asuero, se echó Pur. Esto es la suerte, delante de Amán, para cada día y época del año. Y entonces salió el número doce, que es el de Adar'.

Como podemos observar, tales acontecimientos tuvieron que ver con la trama y la destrucción de los judíos por parte de Amán. Este hombre poseyó un lugar privilegiado en el reino, pero se enfureció cuando Mardoqueo no quiso obedecerle al inclinarse ante su presencia.

Es aquí donde entra en juego el mes de Nibsán, porque sirvió para decidir la suerte que le sobrevendría a este personaje. El cual quiso vengarse no solo de Mardoqueo, sino también de los hermanos judíos que se encontraban a su lado. A la par, pretendía engañar al rey Asuero para que le concediese el permiso por medio de uno de sus altos decretos.

La venganza de Amán en el mes de Nibsán

Ahora bien, el mes primero que era el de Nibsán, se llamaron a los escribanos y se plasmó en texto a nombre del rey Asuero una serie de cartas. Estas se mandaron a diversas provincias y el mensaje consistía en la exterminación de los judíos, sin importar si eran jóvenes, niños, adultos o ancianos.

Como consecuencia de ello, se arregló a los miembros del pueblo para que se prepararan en la matanza de aquel día. Sin embargo, Ester tuvo un papel preponderante al evitar la masacre, armándose de valor y mucha fe. Por ende, habló con el rey Asuero e invitó a Amán a un banquete en el que desveló sus planes siniestros.

Además, Ester le comentó que ella también era parte del pueblo de los judíos. Por eso, tendría que retirar su decreto si no quería que perdiese la vida en el mes de Nibsán.

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