Navaja significado bíblico
Definición. El significado bíblico de navaja es cuchillo de filo muy agudo que se utiliza para rasurar, como se hace en la práctica de la tonsura. Las dos palabras hebreas, que se traducen como navaja, se derivan de la expresión dejar descubierto. Esto se debe a que este instrumento podía tener la cabeza, el rostro o alguna otra zona despejada de cabellos.
Vídeo sobre el significado bíblico de Navaja
¿Usaban los israelitas las navajas para raparse la cabeza?
La respuesta es sí. Aunque ellos acostumbraban a dejarse la barba y llevar el cabello un poco largo, al parecer se lo cortaban con este utensilio. Uno de los primeros miembros del pueblo, que se conoce que afeitó la cabeza, es José, el hijo de Jacob. Cuando se le llamó por el faraón para que le interpretara los sueños.
Él se encontraba en la cárcel, por lo que no sería extraño que su apariencia estuviera algo descuidad. Antes de presentarse ante el gobernante debía acicalarse y rapar su cabeza, como era la costumbre en esa cultura. Según algunos hallazgos por los arqueólogos, se han encontrado navajas de bronce en esta zona.
Dios estableció que los levitas que entrarían a la tienda de reunión en el desierto, debían pasar la navaja por todo su cuerpo. Con esto completaban su pureza y limpieza antes de hacer un acto sagrado de adoración o servicio. De igual forma, quienes decidían tomar un voto de nazareo no podían usar este instrumento sobre su cabeza, hasta que terminará el tiempo fijado.
Ana, la madre del levita Samuel, lo dedicó al servicio de la tienda de reunión desde antes de nacer y prometió que no se le cortaría el cabello con este utensilio. Incluso el fuerte Sansón, quien también era nazareo, Jehová le dio una fuerza extraordinaria que se originaba en su cabellera. Una vez que le fue cortada, él la perdió.
¿De qué manera empleó Dios la navaja en sus mensajes de condena?
Jehová le advirtió a Judá que él utilizaría a los asirios como 'navaja' para quitar el pelo de la cabeza, pies y la barba de todos ellos. Esto representaría la devastación de se daría en el país, donde no quedaría alimentos, ni ganado, ni nada de que vivir.
Por otro lado, a Ezequiel le ordenó que usara una espada como una navaja para rapar su cabello y la barba. Luego debía cortar la tercera parte del pelo con esta espada. De esa manera, ilustraba que un número importante de los que habitaban Jerusalén los asesinarían con esta arma.