Mileto significado bíblico
Definición. El significado bíblico de Mileto es el nombre de una ciudad griega, era la que se encontraba más al sur en toda Asia Menor. Era un puerto en donde se veía mucha afluencia de barcos, por lo que era un lugar importante para el comercio.
No obstante, un problema con el cieno, que era común en toda la costa, detuvo su control del mar y las compras por agua.
Mileto en las sagradas escrituras
El término Mileto en la Biblia se lee en solo contadas ocasiones. Pues algunos personajes se aventuraron hasta aquel territorio. Uno de ellos fue el apóstol Pablo, quien desde allí mandó a llamar a las personas ancianas de Éfeso con el fin de reunirse. En el momento de su partida a Jerusalén, les dio una despedida solemne.
Antes de llegar ahí, tuvo que pasar un largo recorrido y varios pueblos de importancia en la región. Algunos textos sugieren que este creyente dejó a Trófimo en el lugar, puesto que se encontraba muy enfermo.
Fue una colonia helena por mucho tiempo, pero una época la conquisto Alejandro Magno para los egipcios.
Cuna de Filósofos
Importancia de Mileto en la historia
La relevancia de Mileto en la historia es que en ese sitio nacieron grandes figuras de la filosofía. El principal es Tales de Mileto, a quien se le conoce como el padre de la filosofía, por ser el primero en buscar una explicación del universo.
Este hombre difundió el apelativo de la región y la volvió famosa, ya que también fue el fundador de la geometría y la astronomía. En sus trabajos dijo que la vida provenía del agua. Otros dos pensadores fueron sus estudiantes y originarios de Mileto.
Se habla de Anaximandro y Anaxímenes, quienes siguieron los pasos de su maestro y se enfocaron en las mismas ramas. Más tarde Isidoro vendría al mundo allí, un arquitecto, creador de la basílica Santa Sofía.
La denominación de Mileto proviene de la mitología helena en donde era un hombre hijo de Apolo y Areia, una ninfa de creta. Aunque otras versiones difieren y dicen que su madre fue Acacallis, quien tuvo una relación con el Dios.
Mileto se desposó con Eidothea que era fruto del rey Eurito. Con ella engendró dos hijos, el primogénito Kaunos y la niña Byblis.
Debido a la veneración a Apolo, en el centro del poblado se encontraba un templo dedicado, además de un gran teatro. En un momento llegó a posicionarse como la región de mejor arquitectura de Europa.