Milalai significado bíblico

Definición. El significado bíblico de Milalai, es levita que integró el grupo de los músicos que participaron en la dedicación del muro de Jerusalén. Se le menciona junto con Esdras y Nehemías. La raíz del vocablo hebreo quiere decir elocuente, mi habla o circuncisión.

Milalai y los jefes de familia de los levitas se inscribieron en la Biblia, entre esos estaban Serebías, Jesúa o Jasabías. Ellos hacían todo lo que Dios estableció por medio de las instrucciones de David, obedecían cuando les llegaba el turno de su servicio.

En este sentido, Milalai y sus hermanos en la fe vivieron en los tiempos de Joaquim, del gobernador Nehemías y del maestro Esdras. A su lado, también estuvieron los porteros que hacían guardia en los depósitos que estaban próximos a las puertas sagradas.

Milalai en la dedicación de la muralla

En los tiempos antiguos se llevó a cabo una gran celebración en honor a la muralla que con tanto esfuerzo construyeron los hombres de Israel. En ese instante, buscaron a los levitas para que acudiesen a Jerusalén y tocaran cánticos de acción de gracias.

Sucedió entonces que se reunió Milalai y los demás al son de liras, arpas, címbalos y otros instrumentos musicales. Ellos estaban alrededor de Jerusalén, en las aldeas de Netofa y Bet Guilgal, en los campos de Gueba.

Hay que tener en cuenta que estos actos eran de carácter sagrado, por eso, Milalai y sus semejantes tuvieron que cumplir rituales de purificación. Los sacerdotes y los levitas también limpiaban a las personas, las puertas.

Los dos coros y la participación de Milalai

Se organizaron dos coros una vez que los líderes de Judá subieron a la muralla, uno iba hacia la derecha, a una de las puertas principales. Le seguían diversos personajes importantes en las escrituras, como Osaías, Esdras o Jeremías. Al lado de ellos iba Milalai junto con los sacerdotes que llevaban trompetas.

Milalai también se dejó acompañar por Zacarías, Semaías, May, Natanael, entre otros, que cargaban sus instrumentos, en nombre del señor. Aquel que los dirigía era Esdras, su maestro. En cuanto al segundo coro, iba hacia el muro ancho, allí le seguía Nehemías al lado de la otra mitad de la gente.

Ahora bien, el coro en el que estaba Milalai y el otro en el que iba Nehemías, ocuparon su lugar en el templo de Dios. Así lo hicieron todo el conjunto de levitas, sacerdotes, oficiales y demás instrumentistas que, con los cantores, empezaron a dar voces a modo de alabanza.