Lidia significado bíblico

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Definición. El significado bíblico de Lidia es, una mujer mencionada en el nuevo testamento. Su conversión al cristianismo es el primero registrado en Europa. Fue una persona de corazón noble, a quien Dios escogió de entre las naciones para que formara parte de su pueblo.

Vídeo sobre el significado bíblico de Lidia

¿Quién era Lidia?

Esta mujer era natural de la ciudad de Tiatira, en Asia Menor, y luego se mudó a Filipos. En su lugar de origen se le conocía por la industria del tinte. Estas personas habían perfeccionado tanto este oficio, que los demás no representaban una competencia para ellos. Como es de esperar, Lidia practicaba esta profesión y tenía su propio negocio.

No se tiene la certeza si solo vendía el tinte de color púrpura o incluía prendas de vestir y tejidos teñidos. Lo cierto, es que ella y los suyos podían vivir de las ganancias. Por lo que muestran las escrituras, Lidia era cabeza de casa. Esto quiere decir, que a su cargo tenía siervos y esclavos. Es posible que fuese viuda o era soltera, ya que no se menciona familiares cercanos.

¿Cómo llegó Lidia a ser una cristiana?

Antes de que Jesús viniera a la tierra, solo los israelitas de nacimiento tenían el derecho a formar parte de la familia terrestre de Dios. Sin embargo, el pueblo lo rechazó y lo mató. Por eso, Jehová decidió que ahora haría un pacto con algunos judíos de nacimiento y con personas de las naciones. Así que, el creador utilizó al apóstol Pablo, entre otros hombres, para buscar a los merecedores.

Lidia era una adoradora de Dios; es posible que tuviera poco tiempo de convertirse al cristianismo. Tal vez para ese momento casi no había judíos en la zona y no existía una sinagoga. Es por esto, que ella y otras mujeres se reunían los sábados a las orillas del río. Para el año 50 E. C., Pablo estuvo por su ciudad y les predicó al grupo.

Esta mujer y los de su casa fueron los primeros en bautizarse. Por otro lado, le rogó al apóstol y a sus acompañantes que se alojaran en su hogar. Ellos no pudieron rechazar la oferta debido a su insistencia.
Ante esto, fue muy hospitalaria con sus invitados y les dejó una invitación abierta, para regresar cuando quisieran. Después que Pablo y Silas salieron de prisión, fueron a casa de Lidia a pasar unos días. Este tiempo lo aprovecharon para animar a todos los hermanos.

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