Jeiel significado bíblico

Definición. El significado bíblico de Jeiel, es nombre perteneciente a varios personajes del antiguo testamento. Tal vocablo es hebreo y en español quiere decir aquel al que Jehová arrebató, también se escribe Jehiel o se le reconocía por Abiel.

En primer lugar, Jeiel fue un hombre perteneciente a la tribu y descendencia de Rubén. Tuvo parentesco con Judá, José, Hanoc, Hezrón, Carmi, entre otros.

Por su parte, a Jeiel se le contó por el linaje de su familia, donde sobresalió como uno de los príncipes más relevantes a la par que Zacarías. Sus hijos habitaron en el oriente, en las cercanías de río Éufrates, contaban con mucho ganado.

Jeiel y la genealogía de Saúl

El nombre Jeiel también le perteneció a un benjamita procedente de Gabaón que tomó por mujer a Maaca. Se dice en el libro de las Crónicas que su primogénito fue Abdón, pero tuvo otros descendientes como Zur, Cis, Ner, Nadab y Baal. Todos ellos engendraron repoblando la tierra de Jerusalén con sus hermanos.

Jeiel y los valientes de David

Jeiel fue hijo de Hotam, de Aroer y perteneció al grupo de los hombres que prestaron su servicio al rey David. Su labor consistió en ayudarle en el reino junto al pueblo de Israel para que se cumpliera la voluntad de Jehová y los planes que trazó con sus siervos.

Hay que señalar que Jeiel trabajó junto con Jasobeam, quien era el caudillo de los treinta, y peleó en batalla contra más de trescientos guerreros a los que mató. Del mismo modo, Eleazar y los demás pelearon con el grupo de los filisteos obteniendo la victoria porque Dios les favoreció.

Cabe destacar, que Jeiel y los principales de David irrumpían en los campamentos de sus enemigos trayendo consigo grandes hechos que se registran en la Biblia. Sin embargo, otros que pelearon en batalla mataron leones, vencieron egipcios y por ende, entraron dentro de la guardia del rey.

Jeiel el levita

En el segundo libro de las Crónicas se hace referencia a Jeiel como uno de los hijos de Asaf que era levita y estuvo presente en la victoria sobre Moab. Estas cosas acontecieron cuando una gran multitud se acercó del otro lado del mar y de Siria. A pesar del temor que sintió Josafat, se humilló ante Dios pidiéndole socorro para él y su pueblo.

Entonces, los de Amón y de Moab clamaron y volvieron sus ojos a Jehová. Y todo Judá se postró junto con sus niños y mujeres. Luego, Jahaziel quien era pariente de Jeiel, recibió el espíritu del Señor en medio de la congregación.