Deseado de todas las naciones significado bíblico

deseado de todas las naciones

Definición. El significado bíblico de deseado de todas las naciones, es expresión o frase que se relaciona con el advenimiento de Cristo.

Deseado de todas las naciones en la Biblia

En Hageo 2:7 encontramos la siguiente referencia 'Y haré temblar a las patrias, y vendrá el deseado de todas las naciones; y llenaré de gloria esta casa, así dijo Jehová de los ejércitos'.

Podríamos decir que es una de las frases más icónicas que se encuentran a lo largo de las sagradas escrituras. Al hablar del deseado de todas las naciones, se hace referencia de manera principal a la figura de Jesús como rey.

No obstante, existen personas que consideran que el deseado de todas las naciones es Jerusalén. Pero la gran mayoría cree que se trata de una referencia clara al mesías, el libertador de los países y territorios del mundo.

La frase llenaré de gloria esta casa, se refiere al templo del milenio y al establecimiento del reino davídico.  Es así, como podemos apreciar un mensaje de aliento para los judíos que tenían que seguir adelante en su trabajo, a pesar de las vicisitudes.

El espíritu de Dios aún permanecía con ellos y el deseado de todas las naciones le haría compañía a su venida. Los cambios se presentarían a modo de revoluciones y Cristo vendría a reinar, siendo todos los miembros de la tierra colmados por sus infinitas bendiciones.

El deseado por todas las naciones y las profecías

Algunos estudiosos relacionaban al deseado de todas las naciones con la profecía del primer y el segundo advenimiento de Cristo. Sin embargo, otros niegan que se trate de ello y consideran que la frase se refiere de manera exclusiva a los dones que Dios le concedió a la patria.

En Isaías 60:5 apreciamos lo siguiente 'Entonces verás, y resplandecerás; se maravillará y ensanchará tu corazón, porque se haya vuelto a ti la multitud del mar, y las riquezas de las naciones vinieron a ti.'

El gobernante competente entre las naciones

Muchos ponen al deseado de todas las naciones como ese gobernante mundial que regresará y ejercerá su poder. Por supuesto que, se trata de la figura central de Jesucristo, quien es el único capaz de hacer las cosas de manera correcta y de obrar por el bien de la humanidad.

Muchos le dirán consejero, príncipe de la paz o admirable, dado que, establecerá la justicia que tanta falta le hace al mundo. Sus cualidades le convertirán en el mejor gobernante de todos los tiempos.

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