Cun significado bíblico
Definición. El significado bíblico de Cun, es nombre que le correspondió a una de las ciudades que gobernó el rey Hadadézer de Zobá. Se le refiere en los pasajes del libro de las crónicas junto con Tebah y otras regiones que fueron preponderantes para la época antigua.
Vídeo sobre el significado bíblico de Cun
https://www.youtube.com/watch?v=w3Kt1l1pbVk
Cun y la extensión de los dominios de David
David figura en la Biblia como un personaje que ganó muchas batallas en contra de los filisteos y los moabitas, quienes se convirtieron a su favor y le traían presentes. También, derrotó a los habitantes de Soba, asegurando su dominio delante de otros reyes como Hadad-ezer.
El relato donde figura Cun, tiene que ver con el día en que David tomó mil carros, siete mil de a caballo y agarró parte de la guarnición en Siria de Damasco. Su ejército era bastante grande y sus enemigos se convirtieron en sus siervos.
De Tibhat y de Cun tomó el rey una cantidad enorme de bronce que luego le sirvió en la culminación de sus propósitos con Dios. Estas fueron ciudades de Hadad-ezer, de allí se agarraron los escudos de oro que cargaban los siervos de quien gobernó por aquella época. El Altísimo le concedía la victoria a donde quiera que iba.
Conviene destacar que uno de los reyes que fue enemigo de la ciudad de Cun, envió sus saludos y bendiciones a David por pelear en su contra y vencerles. Este personaje llamado Toi tenía guerra en pos de Hadad-ezer, por eso, no dudó en enviar presentes como utensilios de plata, oro y bronce que adorarían la casa del señor.
La derrota a Cun y la construcción del templo
Sabemos que Cun y Tibhat fueron ciudades muy importantes de Hadad-ezer de las cuales David tomó provecho de sus posesiones. La razón es que ganó en la batalla y por eso, hurtó una gran cantidad de bronce con el que más adelante, Salomón elaboró las columnas y utensilios a partir de este preciado mineral.
Los elementos que se tomaron de Cun también fueron relevantes en la construcción del templo de Dios. Estos sirvieron como objetos decorativos que le concedieron mayor prestigio a las estructuras que se dedicaron a la presencia sagrada de Dios.
Hay que tener en cuenta que el día en que David recibió la aclamación de las naciones, le ofreció todo a Jehová en modo de agradecimiento. A pesar de que supo manejar muy bien su éxito, en el fondo de su corazón sabía que solo la Gloria y los elogios le pertenecían al creador del universo.