Salem significado bíblico

Definición. El significado bíblico de Salem hace referencia a paz. Corresponde al nombre de una antigua ciudad donde Melquisedec gobernó como rey y sacerdote.

Vídeo sobre el significado bíblico de Salem

Descripción de Salem

Esta nación antes se llamó Salem. Esto, según algunos historiadores, fue en honor a una deidad semítica occidental. Pero el apóstol Pablo alega que su verdadero significado es Paz. En el vocablo hebreo, se sitúa en el número dual. Lo cual se traduce en paz doble. O como la han llamado algunos, ciudad de paz.

Los orígenes de esta nación se remontan hacia los años de 1943 a 1933 a. E.C., pero cuando David ascendió al trono, fortifico ese sitio y la llevó a la categoría de ciudad. Por eso se le conoció como Jerusalén. De allí que se localice donde estuvo ese lugar. En las fronteras del desierto de Judá.

Una zona retirada de las rutas comerciales de índole internacional. Pero contaba con dos trayectos nacionales que circulaban en las cercanías de Salem. Estas unían el territorio antiguo de Palestina y atravesaba por los valles torrenciales hasta llegar al río Jordán.

Esa primitiva población se ubicaba en la parte central de la tierra prometida. Pese a estar en una región desértica, disponía de suministro de agua dulce. Además, la ciudad se prestaba para almacenar suficiente cantidad de agua en sus murallas. Este líquido no representaba un problema en su población.

Referencias de Salem en la Biblia

En las escrituras se cita de la expresión cuando hablan de Melquisedec, el sacerdote de Jehová, debido a que este al parecer fue rey en esa zona. Por otra parte, se menciona en el relato de Abrahán. Él se encontró con Melquisedec y el gobernante de Sodoma en la llanura baja. En ese mismo lugar, se dice que Absalón, hijo del rey David, estableció un monumento.

Por lo que es posible que ese sitio estuviera cerca de Jerusalén, que luego se convirtió en la capital del reino. Además, el nombre antiguo de la ciudad se incorporó en el de Jerusalén. Un escritor del salmo empleó la expresión en paralelo con Sión. Asimismo, en esa tierra, sirvieron otros reyes que procedían del linaje de David y del sacerdocio levítico.

Se puede decir que fue un lugar emblemático porque allí también se ofreció, como sacrificio al hijo de Dios, Jesucristo. A él lo escogió Jehová para ser el rey y sacerdote, al igual que Melquisedec, sin predecesor ni sucesor.