Pléyades significado bíblico

pleyades

Definición. El significado bíblico de pléyades, es cúmulo abierto formado por estrellas que se ubican en una determinada constelación. En la época antigua solo se distinguían seis cuerpos brillantes porque las personas no contaban con telescopios o mayores conocimientos en astrología.

Las pléyades y las indicaciones de la hora

En el libro de los Hechos existe un episodio en donde Josefo podía ubicarse en una hora específica gracias a la disposición de las pléyades en el cielo nocturno. Con ello, indicaba a los marineros cual serían las mejores condiciones climáticas para partir hacia el mar.

Todas estas cosas en las que se habla respecto a las pléyades, sucedieron cuando los apóstoles de cristo fueron a predicar en Chipre. El espíritu santo les guio al descender a Seleucia para navegar hacia Chipre. Ellos se disponían a anunciar la palabra de Dios por todas las sinagogas.

Otras menciones de las pléyades en la Biblia

En Job 9:9-12 encontramos la siguiente referencia 'Él hizo la Osa, el Orión y las Pléyades, y los lugares secretos del sur. Él hace cosas grandes, maravillosas, sin número. He aquí que él pasará delante de mí, y yo no lo veré. Lo hará y no lo entenderé, arrebatará; ¿quién le va a restituir?'

En tales palabras donde se citan a las pléyades, encontramos una respuesta por parte de Job, quien se encuentra exponiendo la justicia del señor. Él se declaró culpable por sus faltas y dijo que jamás podría justificarlas ante el juicio con el padre santo. Es por eso, que merecía todos sus sufrimientos.

Luego de que Job termina de dar sus quejas, menciona toda la sabiduría y el poder creador de Jehová sobre las cosas. Una de sus creaciones fueron las pléyades, y otros astros que diseñó en la vastedad del universo. Dijo que Dios tenía la misericordia para ayudar a los demás, declarando su majestuosidad.

Las pléyades en el libro de Amós

La Biblia nos presenta otra referencia a las pléyades en los escritos del libro de Amós. Dice que Dios las hizo, así también al Orión, oscurecía los días como las noches, porque grande es su poder. Jehová es quien llama a las aguas del mar y las esparce en la tierra.

Vemos en este capítulo la forma en la que se declara el poder del señor sobre las cosas de su creación. Es omnipotente, puede convertir a los pecadores en creyentes, alejar los malos tiempos o salvar la tierra de la ruina frente a los hombres impíos.

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