Joel significado bíblico
Definición. El significado bíblico de Joel es el nombre de uno de los profetas de los que se habla en las sagradas escrituras. Fue un importante individuo durante un tiempo estimado del siglo 9 Antes de Cristo.
Vídeo sobre el significado bíblico de Joel
Este hombre fue hijo de un señor llamado Petuel y nació en Judá, por lo que creció en Jerusalén. Siendo el lugar en donde realizó su obra y dichos sobre el futuro.
Joel en textos sagrados
El término Joel en la Biblia aparece en numerosas ocasiones, pues varios personajes de estos escritos usaban este apelativo. Del hebreo Yo-el, Significa Jehová es Dios. Sin embargo, los más relevantes personajes que lo portaban son el primogénito de Samuel y el que ejecutaba profecías.
Las mejores producciones de este joven seguidor de Dios fueron la predicción de la plaga de langostas y una fuerte sequía. En donde solicita a su pueblo que ore para así volver a Dios y que las tragedias acabaran.
En la primera de ellas, se dice que Dios se compadece de todos los judíos si se retornaban de nuevo hacía él. Por lo que se pidió ayuno, oración y expiación de los pecados para ser libres otra vez. De lo contario, grandes sucesos astronómicos ocurrirían en toda la tierra.
También dijo que una fuente de agua en el medio del templo aparecería y debido a ello, las langostas llegaban. Mientras que en la segunda, auguraba la reconstrucción del Edén, pues el espíritu del creador se esparciría sobre el suelo.
Otras menciones de Joel
El primer descendiente de Samuel es descrito como uno de los jueces de Israel junto con su hermano. Pero estos, no siguieron el mismo camino que labró su padre, siendo tentados por la avaricia.
Uno de ellos venía de la línea de Simeón, mientras que otro provenía de los parientes de Rubén. Joel el Gadita fue jefe de su aldea, tal como lo fue un Joel familiar de Isacar, quien portó el título de príncipe.
Joel el que provino de Gerson, fue parte de los elegidos para transportar el arca de la alianza a Jerusalén. Uno de estos trabajó como oficial durante la monarquía del rey David. Se menciona un hombre que se santificó limpiando la residencia de Dios.
En los tiempos en los que vivió Esdras se acusó a un Joel de casarse con una extranjera. También se habla de un benjamita que fungió como prefecto en Jerusalén después del exilio.