Cortina significado bíblico
Definición. El significado bíblico de cortina tiene relación directa con las palabras 'cobertura', 'velo', y 'colgadura'. Se refiere a las que separaban el tabernáculo del atrio, también se podía referir solo a la puerta del mismo (Plural qelâîm) que significa en traducción literal 'suspendido de pilares'. El pilar se encontraba por lo común en la parte meridional del atrio.
Una referencia histórica mucho mejor detallada relata que dicha palabra hacía alusión a varias cosas que agrupan un conjunto. Cortinaje o cortinados tejidas y bordadas de forma hábil, para ser colgadas en la puerta del atrio del tabernáculo, en específico en la entrada del mismo, y entre los 2 espacios. También hace referencia a el objeto empleado por Isaías en un sentido figurado, refiriéndose a los cielos, usando las palabras 'gasa', 'doq', 'lit'.
Historia y origen de las cortinas
Desde su creación, han sido un elemento doméstico muy utilizado de decoración de espacios. Aparte de su utilidad para dar privacidad, y proteger los objetos del hogar del sol.
Moisés y las cortinas
El uso de cortinas data de un par de siglos atrás, de hecho, dentro de la historia bíblica, es Moisés quien recibe la orden de construir un templo. La relación que tiene dicho suceso con la historia de las cortinas, es que dicho templo estaba hecho a base de colgaderos y cortinas de todo tipo.
Se ejecutaban en lino torcido, y así dividir los departamentos. Para la unión de estas emplearon corchetes dorados, que servían para entrelazar las cintas de unión. En dicho templo las cortinas no sol jugaron un papel de división, sino que también servían como un elemento decorativo.
Tanto fue su atractivo estético, que se dice que el mismo dios exigió dibujar querubines en el interior de este templo.
El santísimo
Es otro lugar que tiene su historia con respecto a las cortinas. Este sitio se encontraba en la entrada del 'Arco alianza', y fue el propio rey Salomón quien ordeno dividir el tabernáculo del templo con largas y gigantes cortinas que protegieran el arca del pacto.
Estas cortinas solo podían ser traspasadas por el sumo sacerdote. En aquellos tiempos se veían como un implemento bonito y elegante a la vista, además de su practicidad para el traslado que en ese entonces era un punto fuerte a tomar en cuenta. El uso de esta herramienta y decoración se extendió con el paso de los años hasta la actualidad, formando parte de miles de hogares.