Carga significado bíblico

carga

Definición. El significado bíblico de carga hace referencia a algún peso, este puede ser tanto una pesantez simbólica o literal. Dentro de las Escrituras, podemos encontrar que esta palabra se atribuye a materiales que se transportan, aunque se relaciona con cosas inmateriales más a menudo. Este concepto metafórico puede referirse a un sentimiento, alguna culpa o un mensaje de Dios.

Vídeo sobre el significado bíblico de Carga

En el sentido material y literal, esta palabra se refiere a una carga pesada. De igual forma, se relaciona a elementos obligatorios que influyen de manera física o espiritual a quien lleva ese peso.

Significado de carga material

Podemos hablar sobre grandes pesos y también de trabajo duro. Se trata de algo que está generando algún tipo de presión sobre la base que lo soporta, puede hablarse del lomo de un animal, un armazón o una persona.

Durante tiempos antiguos, los animales se usaban como transporte de cargas. Se les dijo a los israelitas que al ver caído al asno de alguien que les odiaba, lo liberaran en lugar de dejarlo. El rey Salomón alcanzó a tener unos 70.000 hombres que llevaban cargas entre los que se reclutaban para hacer trabajos forzados.

Significado de carga inmaterial

La palabra 'carga' igual se utiliza para hablar en modo figurado. Una responsabilidad es una carga, así como incluso lo es un sentir de culpa, ideas negativas o malos pensamientos. Estamos hablando de cualquier cosa que llegue  a producir incomodidad en la mente o el corazón.

Una carga puede ser una tentación, también podría ser la consecuencia de un traspié moral. Incluso tratarse de un malestar físico o mental, presiones, miedos, inseguridades o deudas. Todos tenemos cargas y logran agobiarnos, pero podemos renunciar a ellas y hacer ligeras las cargas de otros.

Se habla también del pecado como una carga. Este peso nos logra alejar de Dios, pues lo impuro no puede ser junto a la santidad. Los seres humanos por naturaleza son pecadores, por lo que, de forma natural, no logran tener una comunión con Dios.

Aunque este tipo de cargas nos haga ovejas alejadas del rebaño, gracias al inmenso amor de Dios podemos estar libres de todo tipo de ataduras y males provocados por el pecado. El Creador envió a su único hijo a limpiar el pecado del mundo y darnos la oportunidad de soltar toda carga que pueda afligirnos. La forma de liberarse de dicho peso es practicando la palabra de Dios.

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