Bosque significado bíblico
Definición. El significado bíblico de bosque se refiere a pedazo de tierra revestida con árboles sembrados de forma natural, a diferencia de un jardín donde es más obvio el uso de la mano humana. El término en hebreo es 'yá`ar'.
En la antigua Palestina sobraban los bosques con árboles de muchos tipos. Los relatos bíblicos nombraban tanto a los bosques como al empleo de componentes de madera, donde indicaban que los bosques eran en aquel tiempo mucho más frecuentes que en la actualidad.
Bosque según las Sagradas Escrituras
Los bosques eran estimados como lugares prioritarios para estancias o revelaciones divinas. En las Sagradas Escrituras se citan ciertos bosques en específico. El 'Bosque del Líbano', hoy limitados a reducidas arboledas, resaltaban por sus espléndidos árboles.
El 'Bosque de Efraín', donde falleció Absalón, probablemente se situaba al este del torrente de Jordán y aparentemente era un bosque muy pesado. El 'bosque llamado Héret' se situaba en el Reino del Sur. (1 Samuel 22:5) 'Pero el mensajero Gad anunció a David: No te quedes en este sitio fuerte; márchate y dirígete a tierra de Judá. Y David se largó, y llegó al bosque de Haret'.
Significado simbólico de los bosques
Símbolo de lo que es abrupto, rústico, sombrío. Personifica el estado previo e indispensable para lograr la iluminación y el orden, por ello los exploradores de lo divino deben pasarlo, aunque sea un sitio donde vive el peligro.
Así como se utilizan los árboles para personificar a personas y dirigentes, las Sagradas Escrituras también hace referencia de los bosques para interpretar simbólicamente a aldeas y sus dirigentes. Por ejemplo, la injusticia de la Judá traidora fue como una flama que pasaría de destruir a su pueblo.
También se emitieron en los Textos Sagrados profecías parecidas contra pueblos paganos adversario del pueblo del Todo Poderoso. Se separaría a los combatientes asirios y se les extraería como árboles de un bosque.
Como muro delimitador, los bosques simbolizan la franja divisora, la frontera, lo desconocido. Las travesías en ellos se visualizan como experiencias y desafíos; regresar es como volver a nacer, la incertidumbre del insensato enterrado.
Igualmente los bosques son las cintas de oscuridad que vigilan en el borde de una ciudad, un lugar en el que podemos lanzar nuestros miedos y temores más hondos. El bosque también se considera significativo de la naturaleza, porque está rodeado de vida; es el sitio de nacimiento de diversidades de flora y fauna.