Kir-moab significado bíblico
Definición. El significado bíblico de kir-Moab, es una de las fortalezas que formó parte relevante de Moab. Se le relaciona con Kir-haresh, una palabra que alude a un muro y donde más adelante se edificó la ciudad que hoy se conoce por Al Karak de Jordania.
Acontecimientos importantes en Kir-Moab
El término kir-Moab aparece referenciado algunas veces en la Biblia. En primer lugar, se le relaciona con la tierra de Elam en la época por la que vivió Abrahán y cuando se llevaron a cabo diversas alianzas con el pueblo de Jehová.
Es probable que kir-Moab fuera uno de los lugares de la Biblia en los que se habla de los cautivos arameos que visitaron tal localidad. Del mismo modo, algunos eruditos creen que en ese sitio se originaron estos clanes, pero la información que se tiene hasta la fecha no es concreta.
En tanto que, es posible que la palabra kir se asocie con Cus, un país por el cual corrían las abundantes aguas del Guijón.
Por su parte, en el segundo libro de los mandatarios se hace mención de Kir-Moab como un lugar de refugio para tres reyes que estuvieron en varias disputas. Todo aconteció porque Mesa dejó la lealtad hacia Israel y no pudo recuperar su supremacía.
A raíz de tales acontecimientos, los moabitas tuvieron que enfrentar un periodo de gran desesperación. Más adelante, el rey Mesa sacrificó a uno de sus hijos y hubo indignación en el pueblo de Israel.
La profecía contra Kir-Moab
Desde hace tiempos muy remotos, Jehová dejó claro que kir-Moab y otras naciones caerían, se destruirían y avergonzarían. Es por eso, que estableció que no se alabarían más por parte de los varones y los que estaban con ella, sentirían el clamor de sus pequeños.
Los hombres de la fortaleza de Kir-Moab llorarían y se arrepentirían de sus actos. Más Dios les dijo que huyeran y salvaran sus vidas para que no se les llevara en cautiverio. Tal y como aconteció con algunos príncipes y sacerdotes de los tiempos antiguos.
En la profecía del Señor se menciona también a un destruidor que no solo acabaría con kir-Moab, sino con otras ciudades que no escaparían del castigo. Se eliminarían los valles, llanuras y la fortaleza quedaría desierta y sin morador alguno.
Maldito sería todo aquel que se rebelara contra las palabras y la voluntad del Señor, y kir-Moab se avergonzaría como la casa de Israel lo hizo de Bet-el.