Kairós significado bíblico
Definición. El significado bíblico de Kairós, es palabra de origen griego que designa un tiempo determinado en la consecución de una meta o proyecto. Se trata de un momento particular y que las personas esperan, aunque, su plazo de vencimiento no se conoce.
La palabra Kairós en el nuevo testamento se basa en la iniciativa divina y en los planes que el Señor tiene destinados para sus hijos en la tierra. Asimismo, se le ubica dentro de los tres tiempos de la historia de la salvación humana.
Se dice que el término Kairós es escatológico y su empleo se da en relación con los eventos que se asocian con el fin del mundo. Por lo tanto, solemos apreciarlo en pasajes de los libros del apocalipsis, en citas que hacen informe a las profecías que anuncian el caos y la destrucción del mundo.
Sin embargo, las referencias de la Biblia en cuanto a Kairós son precisas y aseguran que los hijos de Dios que escuchan sus mandatos son benditos. El tiempo está cerca y todos aquellos que pidan perdón se les reivindicará para que entren en el reino de los cielos.
Importancia de Kairós
El Kairós ocupó un lugar preponderante en la comprensión de Jesús respecto a la cercanía del siglo de su ministerio. Tales cosas acontecieron luego del encierro de Juan en la cárcel, cuando predicaba el evangelio. Dijo en sus palabras que el tiempo se cumplió y que el reino de Dios estaba bastante cerca.
El mensaje invitaba a los hombres a arrepentirse y a creer en lo escrito en el evangelio. Por eso, la predicación fue fundamental al transmitir un llamado en los lugares vecinos con la intención de que todos fueran salvos.
La salvación y el Kairós
En los pasajes de Timoteo aparece el Kairós en las instrucciones sobre la oración, las peticiones y las acciones de gracias al Señor. El siervo pide que los hombres, los reyes y los de las congregaciones vivan en la honestidad y vengan al conocimiento de la verdad. El tiempo es un elemento clave porque nos acerca a Dios y a Jesucristo a través de la espera y la paciencia de su llegada a la tierra.
Timoteo pide que los hijos del Creador oren en todo lugar, levantando sus manos y que ello se corresponda con buenas obras. La salvación llegaría con el Kairós y de la obediencia demostrada por parte de los creyentes que con su fe lograrían conseguir un lugar en el reino prometido.