Heliópolis significado bíblico

Definición. El significado bíblico de Heliópolis, es nombre que le perteneció a una ciudad antigua egipcia que se registra en los pasajes de Ezequiel y que al igual que Bet-semes, se consideró de gran relevancia dentro del contexto religioso. Tal término es griego y quiere decir Baalbec, asociándose con On.

Vídeo sobre el significado bíblico de Heliópolis

https://www.youtube.com/watch?v=BCwTvDiNIEg

También se sabe que la Heliópolis fue la capital política de Egipto y su papel social y cultural fue uno de los más relevantes para el conjunto de habitantes que la conformaban. Sin embargo, se tiene la creencia de que en aquel sitio solía rendirse culto a falsas deidades, por ejemplo, a Amón y demás personajes como Atum o Atón que se simbolizaban a través del sol.

Heliópolis y el juicio sobre las ciudades

La palabra Heliópolis aparece de manera particular en el libro de Ezequiel con referencia a varias de las regiones pertenecientes a Egipto. Allí se habla respecto a una profecía que Dios le dijo al profeta haciendo alusión a la destrucción de las imágenes y de los ídolos a los que las personas se encontraban rindiendo culto.

Al lado de Heliópolis se menciona a Menfis y se dice que ya no habría más príncipes en sus tierras porque el temor azotaría a sus habitantes. Patros y Zoán también sufrirían la condena y los juicios junto con Tebas. El señor fue muy claro al establecer que dejaría descender su ira sobre diversas de estas fortalezas y se encargaría de exterminar a todas las personas que residían en esos lugares.

En su predicción, se habla de los jóvenes de Heliópolis y de las demás zonas que caerían a filo de espada llevándose a las mujeres y a los niños a cautiverio. Los días se volverían oscuros y el poder de los egipcios ya no significaría nada. Jehová pondría fin a la soberbia con la finalidad de que todos reconocieran su potestad.

Reflexión sobre los acontecimientos en las ciudades egipcias como Heliópolis

Las cosas que encontramos referentes a Heliópolis y demás locaciones, nos enseñan la forma en la que Dios se exalta a sí mismo sobre ellos. La razón es que el culto a las imágenes e ídolos no se admite de ningún modo posible. De hecho, tiempo atrás se enviaron las plagas en contra de Egipto y cada una se dedicó a las falsas deidades demostrando la furia de Jehová.

Después de que el Señor hiciera acto de presencia, todo quedaría en ruinas y esto se puede representar con la vida espiritual que debemos cultivar siguiendo el camino de la obediencia.