Ahavá significado bíblico
Definición. El significado bíblico de Ahavá es río o agua. A las cercanías de este lugar había una ciudad que es probable que tuviera el mismo nombre. Se cree que ese sitio formaba parte del imperio babilónico. Tal vez era el punto de parada de muchos viajeros, puesto que estaba entre los caminos de ese tiempo.
Vídeo sobre el significado biblico de Ahavá
¿Qué pruebas hay de que Ahavá sea el mismo Is?
El escritor Esdras indicó que en su viaje de regreso a Jerusalén acampó en el río Ahavá. Este se encontraba a ocho días de su punto de partida. En cambio, Heródoto mencionó que la ciudad de Is se ubicaba a la misma distancia y en sus cercanías existía un canal que desembocaba en el Éufrates.
Por otro lado, la Nueva Enciclopedia Británica (1987, vol °5, pág 949) indica que Hit era una ciudad que se encontraba al margen del río Éufrates. Aunque no era grande, estaba amurallada para protegerla de cualquier ataque extranjero. La construyeron entre unos montículos donde estaban las ruinas de una población antigua (Tal vez se refiere a Is).
La ciudad de Hit tiene unos pozos de betún que han estado utilizando desde hace tres mil años. Es posible que estos cenagales fueran una gran contribución en la edificación de Babilonia. Además, el betún con el que está cubierto sea la misma argamasa que menciona el relato bíblico sobre la torre la Babel.
Cada uno de esos detalles hace pensar que todos estos lugares se refieren al mismo lugar mencionado por Esdras como el río Ahavá. Comprobando, una vez más, la veracidad de la Biblia.
¿Por qué los israelitas acamparon en el río Ahavá?
En los días del rey Ciro, se ordenó la reconstrucción del templo de Jehová en Jerusalén. Así que se envió a una cantidad de personas del pueblo a cumplir con esta obra. Sin embargo, algunos enemigos intentaron detener las obras quejándose con el rey Artajerjes. Con el tiempo, Dios ablandó el corazón de los gobernantes.
El rey mandó a Esdras a Jerusalén a culminar las reparaciones. Además, permitió que todos los israelitas que quisieran ir, lo hicieran. Incluso les dio plata y oro como una fuente de recursos para el viaje. Cuando hicieron la parada en el río Ahavá, el copista se dio cuenta de que no llevaban levitas que sirvieran en el templo. Por eso, envió a un grupo de hombres a buscarlos y los registró.