Unción de los enfermos significado bíblico
Definición. El significado bíblico de unción de los enfermos, es sacramento de curación que se emplea con el fin de purificar el espíritu. A la vez, proporciona alivio o sanación para aquellas personas que se encuentran padeciendo alguna enfermedad.
A través de la unción de los enfermos es posible pedirle al señor que le conceda al cuerpo la salud que necesita para enfrentar los días. Pero no es sólo eso, el alma y el espíritu de los cristianos también se benefician, liberándose de todo lo que les hace daño.
¿Para quién es la unción de los enfermos?
En términos generales, la unción de los enfermos es dada a todos aquellos que estén sufriendo a causa de una terrible enfermedad o que se encuentran viviendo una vejez avanzada. Con esta clase de sacramento, las personas que están dispuestas, reciben la gracia del señor y se colman con todas sus infinitas bendiciones.
En muchos casos, sucede que la unción de los enfermos es capaz de proporcionar la curación completa del cuerpo y alma de la persona que pide con fervor. La iglesia nos indica que puede brindar consuelo, paz y ánimo para que la gente sea capaz de superar sus vicisitudes en la paz de Dios.
Conviene señalar que no sólo los que están cerca de la muerte o los enfermos pueden pedir esta clase de sacramento. Los fieles jóvenes que necesiten una ayuda o que vayan a someterse a una operación delicada, tienen derecho a solicitar que se les administre esta clase de curación.
¿Cómo funciona la unción de los enfermos?
En la unción de los enfermos, el espíritu de Dios se adentra en el cuerpo de las personas para concederles la curación de su alma. Luego de ello, la asistencia del señor es capaz de erradicar por completo los padecimientos o afecciones que causan quejas o dolor en los seres humanos.
Ahora bien, la persona capacitada para llevar a cabo la unción de los enfermos es el obispo o el sacerdote. El proceso consiste en tomar aceite consagrado y colocarlo sobre la frente del paciente, también en sus palmas. Acto seguido, se mencionan unas palabras sagradas que generan una conexión con lo divino.
La gracia del espíritu santo es capaz de conceder alivio, liberar a la gente de los pecados y ofrecerles la salvación eterna. No existe un límite de veces para pedir por la unción de los enfermos, ya que, el señor no aplica leyes o prohibiciones que tengan que ver con el estado de salud de sus hijos en la tierra.