Cristiano significado bíblico

cristiano

Definición. El significado bíblico de cristiano es el nombre con el que se conocía a los seguidores de Jesús de Nazaret, quien es Cristo. Por tanto son todos aquellos miembros de su iglesia que tienen fe en él.

Vídeo sobre el significado bíblico de Cristiano

El apelativo de cristiano apareció en Jerusalén en tiempos de Jesús con un significado despectivo. Pues, algunos romanos y los sacerdotes judíos pensaban que los cristianos eran una especie de secta en donde adoraban a Jesús.

Cristianos en la Biblia

El término cristiano en la Biblia empezó a usarse para denominar a los seguidores de Jesús e identificarlos para arrestarlos y juzgarlos. Así se puede leer en Pedro, en donde dice que si alguno de ellos sufre por ser cristiano no se debe avergonzar por ello. Sino que debe glorificar a Dios por que sigue a su hijo.

Luego el significado de la palabra fue cambiando para referirse a los discípulos o hermanos en la fe de Cristo. De igual manera, cristiano puede significar los del camino de cristo, es decir que siguen el camino de Jesucristo.

La primera vez que se les llama a los discípulos del mesías como cristianos es en la ciudad de Antioquia. Así mismo, Agripa le menciona a Pedro que casi lo convence de ser un cristiano y Pedro recibió este nombre sin ofensa.

Posteriormente, todas las personas creyentes en Cristo, Dios y que tenían fe en estos adoptaron el nombre. Esto con el fin de diferenciarse de los judíos y otras religiones paganas. Hoy en día, un cristiano es todo aquel que pertenece a la iglesia católica y algunas variantes denominadas cristianas.

Etimología de cristiano

La palabra cristiano proviene de la base Cristo que significa el que está ungido, además está compuesta por el sufijo ano, que connota una pertenecía. Así pues, esto quiere decir que una persona cristiana pertenece a cristo o Dios.
Esto coincide con los escritos bíblicos en donde se muestra que el sufijo iano es utilizado para todos los esclavos. Tanto en Romanos como en Pedro se nos explica que somos libres de pecado pero somos siervos de Dios para alabarlo.

En un principio, los apóstoles se denominaban entre ellos como siervos de Cristo, palabra que era sinónimo de esclavo en aquellos tiempos. Sin embargo, no eran esclavos comprados para hacer lo que él quisiera. Sino personas que han decidido seguirle, creyendo y confiando en él y en la palabra de Dios

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