Divinidades paganas significado bíblico
Definición. El significado bíblico de divinidades paganas se refiere a los ídolos falsos creados de la imaginación o la mano del hombre. Constituye el punto de partida de las creencias paganas que se han esparcido por el mundo desde el inicio de los tiempos.
Se considera una usurpación al poder Dios, pues atribuyen a estas deidades, actos o hechos que sin duda han sido realizados por nuestro Señor. Estas divinidades paganas surgían del estudio de las estrellas y fueron muy comunes en tiempos bíblicos.
Idolatría o divinidades paganas
Diversos pueblos cercanos a Israel, adoraban a sus dioses paganos, producto de las creencias de la época. En cuanto a los cananeos, conocían a su Dios supremo como El Elyon o Dios altísimo. También a Isedek y Shalem, referidos a las divinidades paganas de la justicia y la paz.
Aunado a ello, rendían pleitesía a Astarté o dama del mar. Sin embargo, la máxima deidad para los cananeos era Baal, a quien veían como dueño y señor de todo lo creado. Este, según sus creencias, era hermano y esposo de Anat o diosa de la guerra, a quien se encomendaban en batalla.
Los judíos, por el contrario, veían estas creencias como paganas, al punto de no mencionar el nombre de Baal, por considerarlo maldito. Pero si duda, la influencia de Egipto y sus dioses estaba arraigada en los Israelitas. Por ello, inspirados en Baal con su forma de toro, estos esculpieron un becerro de oro durante la ausencia de Moisés.
Las divinidades paganas inundaban la tierra
A pesar de los mandamientos entregados por Dios, donde se prohíbe la idolatría, esta costumbre continuó esparciéndose en el mundo. Podemos ver en la Biblia, como se realizaban los sacrificios para Moloc, Dagón, Adramelec y Anamelec. Sirviendo a Baal, con imágenes fundidas de dos becerros, ignorando los mandatos de la ley de Dios.
En Babilonia, crearon a Socot-benot, los habitantes de Cuta formaron a Nergal, en Hamat hicieron al dios Asima. Por otra parte, los hombres Aveos crearon a Nibhaz y a Tartac. Siendo tan fuerte el vínculo de la idolatría con la astrología, que a Bernabé lo llamaron Júpiter, y a Pablo, Mercurio, por llevar la palabra.
Pero a Pablo, le molestaba ver la tierra inundada de divinidades paganas, dio el mensaje a los judíos en las sinagogas para enfrentar la situación. Llevando el mensaje de Cristo, incentivando a todos a huir de la idolatría, dejar atrás al paganismo y ser creyentes del único Dios nuestro Señor.