Getsemaní significado bíblico

Definición. El significado bíblico de Getsemaní, se refiere al monte en el cual Jesús de Nazaret, oro después de la última cena. Este jardín se encuentra ubicado al inicio del Monte de los Olivos, perteneciente a Jerusalén.

Debido a la abundante cantidad de árboles de este fruto, la traducción de Getsemaní en arameo es prensa de aceite. Esto se debe a la relación con el óleo que emana de dichas plantaciones. Allí Cristo, oró mientras sus discípulos se quedaban dormidos.

Última noche de Jesús en Getsemaní

Nos cuenta la Biblia, que el hijo de Dios, frecuentaba Getsemaní con sus discípulos, ya que era un lugar tranquilo para orar. Este huerto ubicado en la ladera del Monte de los Olivos, fue escenario de los hechos ocurridos antes de la crucifixión.

Luego de llevarse a cabo la última cena, Jesús llegó a este jardín con sus discípulos a descansar. Entonces eligió a Juan, Santiago y Pedro para que lo acompañaran a un espacio alejado de los demás, velaran y oraran con él. Pero, estos se quedaron dormidos, teniendo Cristo que despertarlos en dos ocasiones.

El hijo de Dios, esa noche en Getsemaní le hablo a su padre, sabía lo que se aproximaba, pues en ese momento Judas estaba cometiendo la traición. En efecto, más tarde llegó el traidor en compañía de los guardias a entregar a Jesús. Ellos frecuentaban este jardín, por ello, le fue sencillo darles su ubicación.

Judas procedió a dar la señal acordada luego de recibir las treinta monedas de platal y dio a Jesús, un beso en la mejilla para que lo identificaran. Encontraremos en las escrituras, el relato de ese momento, cuando los demás discípulos trataron de proteger a Jesús.

Incluso, nos cuentan, como Pedro empuñó una espada y cortó la oreja de uno de los guardias, cuyo nombre era Malco. De inmediato, presenciamos uno de los milagros más sorprendentes de nuestro Señor, ya que reprendió a Pedro y sanó la oreja de aquel hombre.

Oración en Getsemaní

Jesús, sabía que su destino se encontraba escrito, conocía muy bien que debía morir para completar su misión al resucitar. No obstante, se sentía afligido y esa noche su sufrimiento desgarrador salió a flote en Getsemaní, mientras le hablaba a su padre.

Se vio tentado por el demonio, para abandonar su misión y no morir. Dios, envió un ángel del cielo con el objetivo de dar fuerzas a Jesús, en esos momentos de debilidad. Entonces, nuestro Señor Jesucristo, se entregó por nosotros, sometido por completo a la voluntad del Padre creador.