Beso significado bíblico

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Definición. El significado bíblico de beso se refiere a un gesto de amor fraterno entre la persona que da el beso y quien lo recibe. Podemos verlo como una señal de paz y afecto entrañable entre familiares y amigos, consiste en contraer los labios, presionándolos sobre la otra persona.

Este símbolo de paz representa el amor puro y verdadero que nace entre seres queridos. Con un beso, demuestras el cariño sincero hacia la otra persona, traduciéndose de alguna forma que el amor de Dios está allí presente.

Beso  como símbolo de cariño fraterno

A lo largo de la historia bíblica, nos encontraremos el beso como un estandarte de paz y fraternidad. Ya sea una forma de saludo, despedida, agradecimiento o muestra de amor puro, observamos como este representa el cariño sincero. Podemos ver el beso en distintas modalidades:

  • Entre padres e hijos es común encontrar este gesto como una forma de bendición entre el amor más fuerte y verdadero que estos se tienen.
  • Cuando ocurre entre hermanos de la misma sangre, es una manera de confirmar la paz en la familia y demostrar el amor fraterno entre hermanos.
  • Si se lleva a cabo entre esposos, se sella el lazo de la unión de pareja. Representa el amor ferviente entre ambos, que fortalece la familia.
  • También observamos esta manifestación de cariño entre suegros y yernos. Pues así, se fomenta la paz entre las familias por medio de esa unión de amistad genuina.
  • Asimismo, existe el beso de la traición, muy común en las falsas amistades. Estas se acercan y entran a tu vida, para clavar la espada por la espalda mientras te besan falsamente.

Sin duda, el beso se traduce en el gesto de amor recíproco que existe entre seres humanos. Dios, está presenta cada vez que das un beso sincero, pues estás transmitiendo paz y cariño a tu hermano.

El beso de Judas

En la Biblia vemos diferentes besos, ya sea en los pies en señal de respeto y veneración, agradecimiento o admiración. También en la frente, el cuello o la mejilla, pero siempre con cariño de por medio, a excepción del beso de la traición.

La traición de Judas Iscariote va acompañada con el beso más famoso del Nuevo Testamento, el de la traición. Pues Judas, recibe treinta monedas de plata por vender a Jesús, regresa a entregarlo y le da un beso en la mejilla. Pero no fue un gesto de amor, sino que esa era la señal acordada para que los guardias identificaran a quien estaban buscando.

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